En los relatos de Bestiario, María Miranda nos invita a sentipensarnos en la naturaleza, con naturaleza.
Naturaleza, de la que somos parte pero como seres atravesados por la cultura, con su carga de contradicciones, rituales de vida y de muerte, de amor y des amor, de pasiones, de nostalgias, de avatares insospechados que nos dejan sin palabras.
Ecos del pasado que aún resuenan en el presente y nos envuelven como una bruma omnipresente.
Acercarse a estos relatos es ir de sorpresa en sorpresa, nos aguardan y a veces hasta nos acechan dragones, esfinges, hipocampos, flamencos, perros azules y hasta un yaguareté.
¿Fantasía, realidad, entresueños o vigilia agitada? ¿Por qué calificar? El desafío es internarnos
irreverente nos propone. para jugar los juegos que esta prosa Huellas de Julio Cortázar y García Márquez, marcas de Alejandra Pizarnik e Italo Calvino,
En estos relatos las palabras vibran, danzan, gritan, interpelan, sacuden la sensibilidad, ponen la existencia humana en el limite, a veces en bordes inciertos y abismales.