Shules y Ateneos

La lectura de Shules y Ateneos no solamente me ha mostrado la compleja vida de ese mundo de la enseñanza no formal a la que apostó, con convicciones, una comunidad tesonera y profundamente creyente en el poder transformador de la educación de los pueblos y su cultura, sino que me ha devuelto la nostalgia -que también anida en trabajos rigurosos como estos- de casos y cosas, hechos e historia viva, de un tiempo que no sé si fue mejor o peor que el actual, pero que me consta que alimentaba la esperanza vital de lograr una convivencia en paz.