Desde una perspectiva psicoanalítica, con aportes de
filosofía y literatura este ensayo pretende una apertura sobre el significado
de la muerte en la vida anímica como fenómeno enigmático, contradictorio y
amenazador, sin caer en lo místico ni en lo sombrío.Según Freud todavía no hemos hallada una nueva manera de
relacionarnos con la muerte, distinta a la del hombre prehistórico, que todavía
se conserva en nosotros oculta en estratos profundos, invisible para nuestra
conciencia.La condición esencial para el sentimiento ominoso que
provoca, es la incertidumbre intelectual, por ello el fin de este escrito es echar
luz sobre este tema que resulta familiar, pero al mismo tiempo indescifrable,
temido y angustiante. La inclinación a no computar la muerte en el cálculo de
la vida trae por consecuencia importantes renuncias, por ello es menester
tomarla como un faro orientador y no como un punto final, ya que su
participación permite hacer foco en el deseo que habita en cada sujeto para dar
lugar a otros modos de vivir la vida, lo que resulta el gran desafío de nuestra
labor analítica, como también ampliar el horizonte de preguntas sosteniendo la
incertidumbre.