Este libro expone, con una amenidad casi novelesca, las biografías de trece proceres argentinos cuya obra y pensamiento han tenido profunda gravitación en los albores de nuestra nacionalidad.

Evitando caer en la apologia, en la ingenua complacencia de exaltar a los héroes, como si de su voluntad inapelable hubiera dependido el devenir histórico, el autor cree necesario, sin embargo, descubrir el aporte personal con que los forjadores del país de los argentinos contribuyeron a su gestación y desarrollo.

Gracias a su capacidad y talento, a su carisma y su lucidez, a sus dotes singulares y sus impulsos temperamentales, ellos pudieron influir en los destinos de nuestra sociedad y nos dejaron una herencia civil que hoy revalorizamos.

Al desplegar el mapa de sus vidas, se elude aqui la tentación de ennoblecer sus rasgos, de abrillantarlos artificialmente y sacralizar el mito tallado sobre sus mármoles. No son dioses los que desfilan por estas páginas, sino hombres de carne y hueso, que tuvieron aciertos y cometieron errores, que obraron con seguridad pero también con vacilación y tibieza, que fueron valientes y conocieron el temor, que unas veces fueron justos y otras, como cualquier mortal, se dejaron llevar por las pasiones.

En esta época de incertidumbre política, de globalización económica, de corrupción y pérdida de los principios morales, de trivialidad e indiferencia generalizadas, de escasez de modelos para la juventud, este libro rescata los valores que apasionaron a nuestros predecesores y estimula el debate que nos permite reflexionar sobre la realidad presente.