El amor es algo muy difícil de determinar, los poetas han logrado transmitirnos muy bien esta dificultad, en tanto parte del goce del Uno y el no hay relación sexual. Enredándose en los signos del goce, ese partenaire de un sujeto intenta atrapar fallidamente a partir de su plus, siendo esa su verdadera pareja. Intento ilusorio de que algo cese de no escribirse, es allí donde puede tener el derrotero de un análisis.
El signo de amor es un modo fugaz en que algo de lo real confronte con esa marca del trauma. Allí surge la escritura-borde, un escrito que no es para leer.
El amor y sus avatares nos llevaron hasta el trauma y la locura. El amor, que para nosotros es el de transferencia, nos permite dilucidar esa locura propia a la que nos empuja el agujero del trauma.
El traumatismo como agujero de lalengua. El síntoma como escritura silenciosa. El análisis permite de algún modo averiar lalengua, conectar el goce como tal al lenguaje y al inconsciente.
El recorrido sobre este tema lo verán reflejado en los diferentes trabajos de los autores, con todos los agujeros en el saber, pues lo real es inatrapable, irrepresentable y mudo, pero nos empuja a una elaboración inventiva. Es por ello que acontece la publicación del libro, junto con varios escritos que nos permiten dar una vuelta alrededor de lo imposible de saber, sin cerrar el tema.