María Zambrano, razón poética por sobre todo otro horizonte, secretísima voz de reconcentrada prosa nos acerca, o mejor, nos conduce con pulso hacia el punto del esplendor, de lo que nace en la claridad y alumbra la mirada y el comunicar.

Hay en De la Aurora un paso que asciende en lo alto de la noche y da cabida a la germinación auroral; otro paso asedia y acecha el espacio del surgimiento de la encendida palabra que fragua su sentido en el ser.